Gandia Bàsquet: 81 – UCAM Begastri: 75

Gandia Bàsquet: Javi Alvarado (8), Fabio García (12), Javi Rodríguez (13), Rubén Burgos (13), Iván Zhauniarovich (14) – cinco inicial – Pablo Castillo (6), Pepe Prieto, Xavi Guía (4) y Goyo Domínguez (11)
UCAM Begastri: Llorente (12), Alarcón (11), Galofre (13), Olmos (2), Garrido (10) – cinco inicial – Fernández (18), García, Alcaraz (4), Navalón y Molina (5)
Parciales: 30-13, 11-15, 12-22, 16-19, 12-6
Por Guillermo Puchol
El Gandia vuelve a refrendarse ganando al segundo clasificado en un partido que se igualó al final, pero que había tenido controlado el Gandia desde el primer minuto.
El partido comenzó sin Gitterer al que tuvieron que poner 6 puntos en la frente tras un choque fortuito en el entrenamiento del viernes. Pero eso no fue obstáculo para que el Gandia arrollase en el primer cuarto al UCAM con un arranque casi perfecto tanto en ataque como en defensa, manejando todos los palos: juego interior, defensa agresiva, tiro desde 6,25, todo a un gran nivel. Así las diferencias se iban acrecentando a favor de los locales hasta llegar a los 30 a 13 con el que acabó el primer cuarto. Rubén Burgos e Iván Zhauniarovich con 8 y 10 puntos respectivamente fueron los máximos valedores de esta ventaja. Tras el pitido final de este cuarto, el público agradeció la exhibición con una ovación no oída aún en esta temporada en el Pavelló dels Esports.
En el segundo cuarto, el UCAM empezó a demostrar porqué es el segundo clasificado y empezó a defender a mayor nivel. El Gandia paró un poco el ritmo del partido lo que más bien le benefició poco ya que en los ataques largos no anotaba con la facilidad que había anotado en el primer cuarto. Así este cuarto resultó bastante igualado aunque con ligera ventaja para los visitantes que se llevaron el parcial por 11 a 15.
Tras la reanudación vino el peor cuarto de los locales que volvían a ralentizar el juego también motivado porque el porcentaje de tiro de los murcianos empezaba a mejorar mucho, con tres triples y ya no cabía la opción de correr. Además, el UCAM volvía a acertar desde la línea de 3 puntos, con un Fernández con un porcentaje elevado al que acompañaba Eloy Galofre. Así, las diferencias se recortaban en el marcador y el fantasma del partido del Castellón sobrevolaba el ambiente. Al final del cuarto el parcial era favorable aún a los locales, pero sólo con 3 puntos de diferencia (53 a 50).
Así el último cuarto empezaba con nervios y el UCAM empataba el partido a 53, a falta de 8:17 para el final del partido. El Gandia, al que no le entraba nada desde la línea exterior, tiraba de casta e intentaba hacer penetraciones que le mantenían en el marcador con Goyo y Fabio tirando del carro. Minutos de nervios, de intercambio de ventajas en el marcador y un 69 a 66 a falta de 10 segundos para acabar el partido. Jugada del Begastri estudiada hasta la saciedad por los de Rubio y sin embargo, error garrafal al salir del bloqueo y triple de Llorente demostrando su sangre fría y que además empataba el partido llevándolo a la prórroga.
Pero en la prórroga el Gandia tiró de orgullo y se puso el traje de defender de las grandes ocasiones y no dejó anotar a los murcianos más que desde la línea de tiros libres, mientras que Fabio García renacía en ataque tras un partido en que había estado poco anotador, aunque soberbio en defensa, y ponía la delantera en el marcador con 5 puntos al Gandia. A partir de ahí todo siguió su curso, el UCAM seguía cayendo en la emboscada gandiense y un Javi Rodríguez que acabó el partido exhausto, remató con un triple que dejó la ventaja final en 6 puntos (81 a 75).
Así pues, partido de los que hacen afición, que el público agradeció con una sonora ovación al final del partido y que pone a los discípulos de Víctor Rubio a dos partidos de ventaja a uno de sus más directos rivales junto con el Palma. Esperemos que alguna empresa o institución tome nota del esfuerzo de este equipo que se está dejando la piel por defender el nombre de esta ciudad en la categoría.