Entrevista a Victor Rubio

Rubio: “Lo que hemos hecho será irrepetible durante mucho tiempo”

Víctor Rubio Estarlich es el máximo responsable de la gran campaña que ha hecho el Gandia Bàsquet. Nació en Alzira en 1978, pero vive en Gandia desde los ocho años. Por tanto, lleva ligado al Gandia Bàsquet desde 1989, a excepción de la campaña 1999-00, en la que jugó en Primera Nacional con el CB Dimar de Valencia. Entró en el club como jugador alevín y 20 años después cierra la temporada como entrenador de un equipo campeón de liga EBA. El pasado sábado contra el Azpeitia, el Gandia Bàsquet se quedó a las puertas del ascenso. En esta entrevista para Safor Guia, Rubio analiza cuáles han sido las claves de estos espartanos del baloncesto, que pasaron de estar fuera de la EBA a casi saborear de nuevo la LEB.

¿Cómo valora el partido del sábado contra el Azpeitia? El Gandia acusó mucho el desgaste físico en los últimos cinco minutos…
Pues un partido durísimo físicamente donde nos pudo en el inicio la ansiedad por querer sentenciar rápido la eliminatoria, donde sufrimos mucho por tener que jugar muy desequilibrados entre nuestro juego interior y el exterior y donde nos destrozaron en la lucha por el rebote… Todo eso aún da más mérito a nuestro trabajo porque, sin un gran partido individual por parte de nuestros jugadores referentes, y con todos los datos en contra, pudimos ganar y sólo se nos escapó a tres o cuatro minutos del final.

¿Qué fue lo más emotivo tras el final del partido?
Todo fue emotivo. Ver a tus jugadores llorar, a tus compañeros del cuerpo técnico tratando de consolar a nuestros chicos, es un mal trago difícil de pasar. Ver a tu familia que, es la única que sabe realmente todo lo que has luchado, ver a tu mujer llorando de pena por ése sueño que se nos escapaba es muy duro, pero no deja de ser el deporte en sí. Para que unos asciendan, otros se han de quedar en el camino y en esta ocasión nos tocó la parte mala. Pese a todo, lo más emotivo sin duda fue la entrada al vestuario y mis palabras al final del encuentro. Fue un momento íntimo del equipo y que siempre quedará para nosotros.

¿Perder el sábado pasado ha sido menos malo que tener que renunciar a jugar la LEB Plata por falta de avales?
Como deportista y competitivo al máximo que me considero, me cuesta verlo así. Yo soy el entrenador del Gandia Básquet y como tal, mi labor es tratar de llevar al equipo al límite de donde pueda llegar, y en este caso hubiese sido el ascenso. Si lo hubiésemos logrado, mi labor habría culminado en la cima, y entonces hubiese empezado el trabajo de otros por decidir qué hacer y tratar de cumplir con lo conseguido en la pista. Creo honestamente que me duele más perder el ascenso después de lo luchado en la pista, que por cuestiones ajenas a uno mismo.

¿Es un milagro haber llegado hasta aquí?
Es increíble haber llegado hasta aquí. Pensemos en qué objetivos nos planteábamos el 26 de febrero con toda la crisis institucional que sufrimos, con la retirada del equipo de la competición, con la marcha de cinco jugadores básicos en el equipo… y valoremos ahora, qué hemos conseguido y cómo lo hemos conseguido. Entre pretemporada, liga y playo ff hemos ganado un 76% de partidos, hemos sido campeones a tres partidos del final en la cancha del segundo clasificado, nos hemos partido la cara en cada partido sin excusas y transmitiendo una casta y un coraje encomiable. Creo que pasará mucho tiempo hasta que volvamos a tener un equipo que transmita tanto y con el que uno se pueda identificar de esta manera cuando lo ve.

Tras la crisis del 26 de febrero, ¿hasta donde hubiera firmado llegar? ¿O hasta dónde pensaba que no se podía llegar?
El mensaje que dige a mis jugadores en el primer entrenamiento del equipo el pasado agosto, cuando empezó esta temporada, fue que no quería que nadie ni nada nos pusiese límites a nuestra ambición y a nuestra ilusión, y con todo lo que nos ocurrió después, el mensaje seguía siendo el mismo. No sabíamos a donde llegaríamos, pero sabíamos que si hacíamos las cosas bien, tendríamos opciones de competir….aunque ni yo, que soy el más optimista del grupo por naturaleza, creía que podríamos llegar hasta donde hemos llegado. Estoy absolutamente orgulloso e identificado con todos y cada uno de los que han formado este equipo, jugadores y cuerpo técnico.

Pero tras aquellos días de febrero, el Gandia consigue ganar buena parte de los partidos que quedaban, y ser campeones a falta de tres jornadas de que acabara la liga....
Después hemos ganado 3 de 6 en el playoff, para un total de 10 de 14 partidos. Es un balance increíble, puesto que en las condiciones que estábamos, fuimos capaces también de ganar al Calpe sin Xavi Guía, o ganar en Llíria sin Xavi ni Javi Rodríguez. Lo que ha hecho este equipo es digno de admirar.

¿Cuál fue el secreto para continuar adelante?
Que no nos quedaba otra. Habíamos decidido continuar en esas condiciones (6 jugadores, Ivan Salom, Vicente Úbeda y los 4 juniors), y los que iban a saltar a la cancha a dar la cara y a seguir llevando el nombre del club por la liga EBA, íbamos a ser nosotros. Así que apretamos los dientes y tiramos para delante… Ajustamos nuestro estilo de juego a nuestras circunstancias, y con las victorias empezó a subir nuestra autoconfianza… y a partir de ahí, nos convertimos en el equipo a batir por todos.

¿Qué opinión tiene sobre la gestión de 'Tano' y el posterior traspase de poderes a APLEG?
Me hubiese encantado ascender por Pep. La semana pasada vino con nosotros hasta Azpeitia en el autobús, y quiero agradecérselo públicamente porque se hace muy duro estar viajando 10 horas para una persona como él. Probablemente fue su último viaje como presidente y me alegro que fuese conmigo como entrenador, y por la misma regla de tres, me hubiese encantado dejarle donde se merecía. Sin su decisión de continuar aquel 26 de febrero (por encima de todo lo que supuso para él esa decisión a nivel personal, y lo duro que fue tener que tirar adelante), y ayudarse de APLEG para poder continuar, nada de todo lo que hemos conseguido, hubiese sido posible, y eso es algo que hay que agradecerle de por vida.


Gitterer, Burgos, Domínguez, Castillo y Prieto. ¿Cómo están? ¿Qué noticias tenemos de ellos?
Castillo y Prieto acabaron la liga en el CB Tavernes. Domínguez fue a Palma, llegaron a jugar los play offs y cayeron en la segunda ronda ante el Ciudad Real (que a la postre ha ascendido), Rubén Burgos se fue al Castellón y también disputó el play off de ascenso, cayendo en segunda ronda contra el Mérida, y en el caso de Gitterer, se fue a Palencia a la LEB Oro, y tras acabar su temporada, estuvo el último mes aquí en Gandia ayudándonos a mejorar la calidad de los entrenamientos.


¿Su continuidad está asegurada?
Ahora mismo nada está asegurado. Es momento de sentarse reflexionar respecto a todo lo acontecido este año, valorar cómo estamos como Club y a dónde queremos ir, y sobre todo, de qué manera queremos ir hacia donde nos hayamos planteado. Para mí Gandia es y será siempre mi casa y mi primera opción, pero ahora es momento de descansar, analizar las opciones que aparezcan, y valorar qué pretende el club y qué objetivos tiene. Si continuo, por supuesto que me encantaría que mi cuerpo técnico siguiese conmigo. Han sido personas trabajadoras, leales y con las que me he sentido muy respaldado en un año muy duro para todos, pese a que los resultados positivos tapasen a veces el lado malo de la historia. Son profesionales muy preparados e identificados con el Club lo que aún les hace mejores.

En el club he sido jugador en todas las categorías, entrenador en todas las categorías, preparador físico de la cantera, coordinador de la cantera, director del campus de verano del club, preparador físico y entrenador ayudante del primer equipo, y finalmente primer entrenador del Club…. Creo que sólo me queda ser directivo y por supuesto presidente… (risas).

¿Cómo perfilaría el equipo de la nueva temporada? Antonio Segovia ha despuntado estos últimos meses…
La mejor noticia del año, una vez no conseguido el ascenso, ha sido la aparición de Antonio Segovia. Es un jugador y una persona a la que le tengo un cariño especial. Le entrené en categoría alevín, y en su etapa junior y siempre ha sido un jugador que no dejaba de mejorar. Este año ha dado un paso adelante muy importante para su vida como jugador, y pienso que debe ser una prioridad para el Club, retenerlo y valorar su evolución y su futuro papel importante en el equipo del año que viene. Me alegro mucho por él y porque su debut “profesional” fuese bajo mis órdenes. Del futuro, poco que decir hasta que sepamos qué va a ocurrir con el club.

La afición ha tenido altibajos, pero a última hora parece que despertó. ¿Volverá a emocionar el Gandia Bàsquet la próxima campaña?
Lo que hemos hecho va a ser irrepetible durante mucho tiempo. Se nos van a exigir resultados parecidos a los de este año, pero entonces valoraremos realmente lo que hemos conseguido esta temporada. Nos alegra haber conseguido que, tras el descenso del verano pasado por temas económicos, y tras una primera parte de esta temporada donde no se conseguía una gran conexión entre grada y equipo, el pabellón reflejara el otro día una gran entrada, con un público identificado con su equipo y orgulloso de él. Quiero agradecer a todos que viniesen el sábado a apoyarnos, pero por encima de todos ellos, a los fieles que estuvieron en los malos momentos y que aguantaron los partidos no tan buenos. Esos son realmente los que sufren y sienten este club.