Gandia Bàsquet: Javier Alvarado (12), Xavi Guía (15), Fabio García (10), Javi Rodríguez (9), Iván Zhauniarovich (7) – cinco inicial – Vicent Úbeda, Carlos Ramos y Antonio Segovia (9
LAN MOBEL ISB: Ibargutxi (14), Osa, Lander Lasa (29), Artiz Martínez (8), De la Iglesia (6) – cinco inicial – Alarcio, Cavada, Arambarri (8), Edu Ruíz (8) y Quintana
El Gandia Bàsquet perdió el último partido de la eliminatoria para el ascenso, eliminando así la posibilidad de ascender a LEB Plata por vía deportiva. Ante un pabellón repleto como hacía tiempo que no se veía, con ambiente de fiesta y con un cierto tufillo prepartido a eliminatoria ganada. Pero los técnicos del Gandia Bàsquet ya habían avisado que no estaba todo ganado, que el equipo vasco era un equipo muy compensado y que cualquier contratiempo podría ser una losa insalvable para los gandienses. Así, hasta tres jugadores tenían problemas gástricos (Alvarado, Fabio y Zhauniarovich) en la previa del partido, lo que mermó la condición física del Gandia Bàsquet. Y pesó mucho en el juego. Sobre todo la del bielorruso que tuvo que bailar con la más fea, o mejor dicho, las más feas, porque se las tuvo que ver con tres pívots que iban rotando mientras él tenía poca tregua. Esto nos dice mucho más de estos jugadores que aún estando físicamente débiles volvieron a hacer el máximo por estar con luchando junto a sus compañeros
Así el partido comenzó bastante igualado y sin darse ningún respiro los equipos. Los de Azpeitia tomaban ligeras diferencias sobre todo por la aportación de sus pívots y de Lander Lasa, figura del partido de ayer, llegando a 16 a 20 al final de este cuarto.
En el segundo cuarto, el Gandia equilibró un poco más su juego y gracias a un Xavi Guía inspiradísimo aguantaba las embestidas del equipo vasco. Así se llegaba al descanso con un punto de diferencia para el LAN MOBEL (32-33).
Tras la reanudación el Gandia realizaba un magnífico cuarto, con gran acierto en la línea exterior y con la ligera aparición de Zhauniarovich en el juego interior. Aún así, los locales empezaban a sufrir en demasía en el rebote defensivo, lo que permitía que el equipo vasco no perdiera comba en el marcador.
Y en el último cuarto pasó lo que no había pasado hasta la fecha. El Gandia, que había ganado todos los últimos cuartos de todos los partidos del Playoff, perdió el del partido clave. Al LAN MOBEL le salía todo lo que intentaba, dominaba el rebote ofensivo, lo cual le permitía tener segundas y hasta terceras oportunidades, mientras que los gandienses no encontraban forma de anotar, bien sea por la dureza de los pívots vascos, a los que no les importaba golpear, en algunos casos rozando la antideportiva, a los jugadores que iban a anotar canasta, bien por el escaso acierto a la hora de seleccionar acciones. Así, en los tres últimos minutos, el Gandia estaba en playoff, pero justo en ese momento, la gasolina se acabó, hundiéndose ante el gran momento de los jugadores del LAN MOBEL.
A veces el deporte es injusto con los que más lo merecen. Sin restar mérito al LAN MOBEL ISB, justo vencedor, el Gandia Bàsquet ha realizado una temporada histórica, llena de hitos inimaginables, venciendo a equipos con mucha más calidad y profundidad de banquillo. Pero ayer no pudieron rematar la gesta. Sería de ignorantes culparles por no haber podido vencer ayer. Estos espartanos del deporte, han demostrado unos valores extraordinarios y poco vistos tanto en el deporte como en la sociedad actual. Sólo podemos aplaudir su coraje, reconocer lo que han hecho disfrutar a esta ciudad y lo que se han vaciado para ofrecer lo mejor de sí mismos a este deporte. Ánimo campeones…
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